Rollos de canela sin fracasar en el intento

Desde un tiempo para acá he cogido como costumbre el invitar gente a comer a mi casa, es una actividad que disfruto muchísimo, en parte porque es la ocasión ideal para probar nuevas recetas. El reto que siempre me supone a mí hacer este tipo de eventos es que me ENCANTA hacer recetas que jamás he hecho, así que la posibilidad que todo fracase es un 50/50, pero si no se corren riesgos, la comida no sabe igual.

Para la última invitación que hice a mi casa, que fue un brunch de sábado, tenía que pensarme un menú que tuviera una variedad de platos suficiente para suplir desayuno y almuerzo, por lo que debe haber un balance ideal entre lo dulce y lo salado. Mi mente sabía que todo buen menú de brunch se compone de mimosas, huevos, frutas, bebidas calientes, panes, dips, y algún postre. Sabiendo eso, sólo tenía que ocuparme de qué recetas iba a sacar de mi arsenal para sorprender a mis comensales, lo único que tenía claro era que quería hacer rollos de canela.

Yo tengo una leve adicción con la canela, se la echo a todo lo que me sea posible. Se imaginarán lo mucho que me gusta comer rollos de canela, nunca le digo no a un Cinnabon, pero, para serles franca, como muy poco este postre, soy bien quisquillosa con ellos, y la mayoría me parecen flojos. Por esta misma razón siempre quise intentar hacerlos de forma casera, pero jamás me había preocupado por siquiera buscar una receta, mi mente juraba que debía ser un proceso muy complicado. Hasta que hace unas tres semanas estaba perdiendo mi tiempo en Pinterest y encontré un video -y su respectivo blog- con la receta... y ¡Tarán! lo guardé para intentarlo para mi reunión.

Como ya les he contado, soy una desconfiada de las recetas, así que antes de intentar hacer los rollitos, comparé el video que había visto con unos dos o tres más, sólo para poder ponerme creativa haciéndolos. En general me di cuenta que la masa no requiere muchos ingredientes, ni mucho amasado, ni mucho cuidado, lo cual me encantó. Así que, previendo que todo podía ser un fracaso, los preparé la noche anterior al evento, sólo por si tenía que salir a compra algo en la mañana del sábado como plan b. Pero no fue necesario, ha sido de las preparaciones más sencillas que he hecho, probablemente lo más difícil que encuentro es dar con el grosor perfecto para la masa, o tal vez que el agua para activar la levadura tenga la temperatura ideal. Pero bueno, dejaré que ustedes juzguen si mi juicio es real, mientras, espero que disfruten de esta receta tanto como yo (que ya la hice dos veces y muero por volverlos a hacer).

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Rollos de Canela

Tiempo de preparación: 1hora

Tiempo de cocción: 15-20min.

Porciones: 9 rollitos, aprox.

Masa:

1/3 taza de agua tibia

1 cucharada de azúcar blanca

1 cucharada de levadura

1/4 taza (63gr) de mantequilla, derretida

1/4 taza de leche tibia

1/4 taza de azúcar

2 1/2 tazas de harina de trigo

1 cucharadita de vainilla (opcional)

Relleno:

1/2 taza de azúcar morena (o 1/4 de azúcar morena y 1/4 de panela)

1 cucharada de canela

1-2 cucharadas de mantequilla.

Preparación:

En un plato hondo vierten el agua tibia con el azúcar y la levadura, y revuelven un poco; dejan reposar la mezcla por 5min.

En un bowl grande, aparte, revuelven la mantequilla, la leche y el azúcar; luego vierten la mezcla de la levadura y revuelven. [Aquí agregar la vainilla]

Después, añaden la harina de a 1/2 taza, hasta que se forme una masa compacta y no pegajosa. Ahí, cubren el bowl con una toalla o vinipel y dejan reposar la masa 20min.

Mientras, precalientan el horno a 200°C. Y en una tacita mezclan el azúcar morena y la canela.

Pasados los 20min, extienden la masa, con un rodillo, formando un rectángulo con un grosor de 3mm. Le esparcen mantequilla derretida por toda la superficie y cubren con la mezcla de azúcar y canela.

Hacen un rollito con la masa, como si estuvieran enrollando una alfombra, y luego cortan discos de similar grosor con un cuchillo liso.

Ponen los discos en una refractaria engrasada y hornean por 20min.

Nota: Pueden decorar con queso crema y azúcar pulverizada o con chocolate rayado.